Brasil: ZF invierte en la nacionalización de los componentes de las bolsas de aire

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La última generación de ACU, Airbag Control Unit, se produce en Limeira, de acuerdo a un informe de Auto Industria.

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ZF anunció este miércoles, 26 de octubre, que nacionalizó la última generación del componente de seguridad ACU, la Unidad de Control de Airbag, ahora producida en Limeira, en el interior de São Paulo.

Este control funciona como el cerebro de los airbags, ya que es el encargado de comandar cuándo se dispararán.ZF2

“La producción de la nueva generación de ACU, la 7.5, trae grandes beneficios de seguridad a los usuarios de vehículos, ya que fue planificada para cumplir con requisitos de seguridad cada vez más avanzados”, comenta Gustavo Ducatti, Director de Ingeniería y Operaciones de Seguridad Pasiva y Electrónica de ZF Sur América.

Según el ejecutivo, las versiones GEN1.8BRIC, GEN6.5 y GEN7.5 se están produciendo localmente, “lo que significa que ofrecemos la última tecnología global de ZF también para nuestra región”. La unidad de Limeira inició la producción de la nueva generación solo seis meses después del lanzamiento global en Asia.

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Ducatti recuerda que ZF fue la primera empresa en ofrecer la tecnología al mercado brasileño, a partir de 2013, y desde entonces sigue siendo la única empresa del país que produce este y otros componentes electrónicos de seguridad. Además de ACU, la unidad de Limeira también produce Unidades de Control Electrónico para ABS (Sistema de Frenos Antibloqueo), EPS (Dirección Asistida Eléctrica) y EPP (Paquete de Energía Eléctrica).ZF3

La operación también fue diseñada para atender la demanda de ESC (Electronic Stability Control), tecnología para la que hay proyectos contratados en fase de aprobación, cuya producción en serie comenzará en 2023.

El ACU fabricado en Brasil por ZF funciona junto con los cinturones de seguridad, que están equipados con pretensores activados por la unidad unos momentos antes de que se abra la bolsa de aire. La solución elimina cualquier holgura en el cordón y permite que funcione correctamente.

“Dado que el accidente es inevitable, el rol de la ACU es realizar la detección del accidente a través de la lectura continua de los sensores internos y externos, los cuales son procesados con un complejo algoritmo, que toma la decisión de activar los pretensores y bolsas de aire, en para minimizar los daños al conductor y a los ocupantes”, explica Plínio Casante, Gerente Senior de Ingeniería y Operaciones de la Unidad de Electrónica de ZF Sudamérica.

 

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